Tarde de feria (1995)
Medio siglo fotografiando la modernidad
Miguel Trillo nació en los años 50 en Jimena de la Frontera (Cádiz). Al poco tiempo de trasladarse a Madrid para estudiar en la Universidad Complutense comenzó en el oficio de disparar tras el visor. Su mira estuvo siempre puesta en las personas y, en particular, en los escenarios, debido a su afición por la música. Aunque pronto su carretes de película en blanco y negro se convertirían en testigos fiel del profundo cambio de la sociedad, que buscaba el color tras los años grises de la dictadora.
El reloj tiene la batalla perdida con la paciencia de Miguel Trillo, el autor de retratos directos a personas anónimas, con una marcada personalidad. Recorrió España para dejar constancia de que una nueva generación de punkis, siniestros, raperos, heavies o mods, habían dejado atrás el franquismo.
Miguel Trillo confiesa que pertenece a una generación cuyo objetivo era ser artista y no fotoperiodista, y considera que la fotografía documental también es arte, arte callejero. Para realizar las fotografías colocaba a sus sujetos y les hacía mirar a la cámara. Técnica que estaba en las antípodas del planteamiento periodístico, donde el reportero es mero espectador de lo que acontece, sin interferir en la escena.
El Rockocó,el primer fanzine que hubo en España
Rockocó fue el nombre que Miguel Trillo decidió para el fanzine en blanco y negro que editó con fotografías tomadas en conciertos y festivales en Madrid durante la primera parte de la década de los ochenta, en pleno boom de las autoediciones y los fotofanzines.
En total publicó seis números, con más de 350 imágenes, cada uno dedicado a una estética musical, excepto el primero que fue un monográfico sobre 1980 que se tituló Especial Movidas 1980. El número 1 se centró en los mods, el 2 en los punkies, el 3 en los modernos, el 4 en los rokers y el 5 en los heavies.
Los dos primeros números se imprimieron en offset y los restantes en fotocopias. La tirada fue de entre 200 y 500 ejemplares que iban numerados a mano. En ellos nunca se indicaba la autoría de la edición. En 1986, la revista Madrid Me Mata publicó un amplio portfolio dedicado al fanzine en el que se hacía constar por primera vez quién era el autor de Rockocó. En la actualidad, está considerado el primer fanzine que hubo en España.
Según el fotógrafo Miguel Trillo, Rockocó tuvo su origen cuando Miguel Oriola, que dirigía en 1980 una revista llamada Poptografía le seleccionó un portfolio para el que iba a ser el último número de la revista, el cual nunca llegó a ver la luz. Trillo añadió más fotos a ese portfolio, lo editó en forma de fanzine y lo distribuyó en tiendas de discos.
En 2017, la editorial La Fonoteca los ha reeditado, teniendo una buena acogida por parte del público, que busca en ella recuerdos de la época vivida.